Es la primera vez que que hago esta receta pero he quedado muy satisfecha. No suelo usar manteca de cerdo pero en este caso es indispensable para obtener el sabor y la textura del mantecado.
Es una receta estupenda para hacer con niños porque es como hacer galletas; se usa rodillo, se corta la masa con figuras y el baño de chocolate se puede hacer con los dedos cuidando un poco no chorrear demasiado. Además es una masa fácil de manejar.
No los he hecho muy gordos de manera que quedan tipo galleta o pasta de té. Unos se bañan con cobertura de chocolate y otros con azúcar gláss, así de simple. Y están buenísimos.
Otro punto importante es vigilar el horno una vez que los metemos para que no se quemen. El horno debe estar precalentado y tardan unos 15 minutos o cuando veamos que están ligeramente dorados; en este momento es cuando no debemos separarnos del horno.
En la receta original se usó vino blanco pero yo no tenía así que utilicé un poco de ron, eso sí un buen añejo.
INGREDIENTES:
120 gr. de manteca de cerdo a temperatura ambiente
1/2 cucharada de aceite de oliva
3 cucharadas de ron (o vino blanco)
330 gr. de harina tamizada
40 gr. de azúcar
1/2 cucharadita de sal
-Para la cobertura:
125 ml de nata líquida para montar
media tableta de chocolate para cobertura (o un poco más); la consistencia debe ser líquida pero tirando a espesa.
un trozo de mantequilla (unos 25 gr. pero depende de cada uno, yo intento poner poca)
azúcar gláss
- Horno precalentado. 170º unos 15 ó 20 minutos
-La masa hay que dejarla enfriar en la nevera media hora.
PREPARACIÓN:
1. Mezclar el azúcar con la manteca de cerdo blanda en una batidora.
2. Añadir el aceite de oliva, seguir batiendo. Añadir el ron y seguir batiendo.
3. Echamos la sal junto con la harina tamizada. Seguimos batiendo hasta que todo quede integrado.
4. Juntamos con las manos los trozos de masa y hacemos una bola hasta que no se nos pegue en las manos (usamos un poco de harina).
5. Envolvemos la masa en plástico y la mentemos en la nevera durante media hora.
6. Preparamos la bandeja con el papel de horno.
7. Extendemos la masa sobre una superficie con harina y le pasamos el rodillo. El grosor depende de cada uno; a mí me gustan entre 5 y 8mm para que no queden muy gorditos. Usamos los cortadores de galletas para darles forma y colocamos en la bandeja los que quepan, separados unos de otros.
8. Horneamos unos 15 minutos o hasta que estén ligeramente dorados. Dejamos enfriar.
9. Cubrimos algunos con azúcar gláss tamizada.
10. Para la cobertura de chocolate, calentamos la nata e incorporamos la media tableta de chocolate poco a poco removiendo para que se disuelva; por último añadimos la mantequilla y seguimos removiendo hasta que se disuelva por completo.
11. Bañamos las pastas en el chocolate con cuidado de que no escurra demasiado y dejamos secar sobre una rejilla.
