Un plato mexicano que me encanta y que suelo comer mucho cuando estoy en México son las tostadas. No hay que equivocarse con las "tostadas europeas de pan para el desayuno"; las tostadas mexicanas se preparan, como no, con las tortillas de maíz como base.
Como ya he dicho en otras ocasiones las podemos comprar en las tiendas de productos latinos.
La tostada es la tortilla dura y crujiente. En algunos lugares las venden ya así pero son muy frágiles y caras. Lo único que tenemos que hacer para pasar de la tortilla a la tostada es meterlas al horno caliente unos minutos hasta que se doren. Cuidado porque el paso del dorado al quemado es muy rápido.
INGREDIENTES:
6 tostadas
lechuga cortada fina
salsa verde (de bote) la venden en tiendas de productos latinos
nata agria o espesa
1 bote de alubias pintas para hacer los frijoles refritos
queso rallado
1 pechuga de pollo
cebolla morada (opcional)
aceite de girasol
sal
1. Cocemos la pechuga de pollo con un poco de sal (aprovechamos para hacer un caldo con alguna verdurita) y lo deshebramos.
2. Vaciamos el bote de alubias en una sartén con un poco de aceite y poco a poco las vamos machacando con el tenedor hasta que se forma una pasta. No suele ser necesario pero podemos añadir un chorrito de caldo si está demasiado seca. Debe quedar con consistencia de pasta para poderla untar.
3. Montamos las tostadas:
Sobre cada tostada untamos la pasta de alubias o frijoles refritos; sobre ésto colocamos algunas tiras de pollo; sobre el pollo ponemos las tiras de lechuga con un poquito de sal; con cuidado agregamos un toque de nata, el queso rallado, los aros de cebollita morada (opcional) y la salsa se pone a parte en un recipiente para que cada uno elija la cantidad que le guste.
Así de fácil tenemos una especie de ensalada de pollo súper crujiente desde el primer mordico.
NOTA: Para los que nunca habéis comido tostadas mexicanas y para los que sí las hemos comido, a veces no es sencillo conseguir que no se rompan y el todo el contenido desparrame sobre el plato; en este caso recomiendo tener a mano un tenedor. También puede ocurrir que la tostada se de la vuelta 360º, a mi me ha ocurrido sólo una vez pero el que avisa no es traidor así que mucho ojo al morderlas...
